Rosa Mercedes Huarhua Beltran, Dajanna Maria Navarrete Dilas
DOI: 10.59427/rcli/2023/v23cs.524-534
La ética es fundamental para la dignidad de un magistrado dentro de la función pública, ya que su capacidad para desempeñar su papel de manera justa e imparcial en el sistema judicial está directamente relacionada con su capacidad para actuar con integridad y profesionalismo. Los magistrados deben mantener altos estándares éticos para preservar su propia dignidad y la integridad del sistema judicial. La ética pública es fundamental para el correcto funcionamiento del sistema judicial, y los magistrados son uno de los actores clave en la promoción de una cultura ética en la administración de justicia. La imparcialidad, la integridad, la responsabilidad y la independencia judicial son algunos de los principios éticos que deben guiar el desempeño profesional de un magistrado en el sistema judicial. La promoción de una cultura ética en el sistema judicial es fundamental para garantizar que las decisiones judiciales sean imparciales, justas y equitativas, y para preservar la confianza del público en la administración de justicia. Por ello, La imparcialidad, la integridad, la responsabilidad y la independencia judicial son algunos de los principios éticos que deben guiar el desempeño profesional de un magistrado, que en el presente artículo se plantean fórmulas a fin de limitar las prácticas antiéticas por la magistratura, sin esbozar prejuicios que, son generalizadas las infracciones a la moralidad propia de un Juez, al contrario, es de relievar su accionar conteniendo reglas claras.
Pág 524-534, 07 Jun